Por Logan Jiménez, periodista
ELFARORD.COM. La comunicación institucional es una herramienta fundamental para la transparencia, la rendición de cuentas y la efectiva gestión pública en cualquier nivel de gobierno. En el caso de los ayuntamientos de la República Dominicana, el rol de los directores de comunicación debería ser clave para garantizar una adecuada relación entre las autoridades locales y la ciudadanía. Sin embargo, la realidad actual en muchos de estos municipios refleja una preocupante debilidad en este puesto, lo que afecta el cumplimiento de su misión.
Una de las principales causas de esta debilidad radica en la falta de profesionalización y capacitación adecuada de quienes ocupan el cargo de director de comunicación en los ayuntamientos.
En muchos casos, estos puestos son asignados por afinidades políticas, en lugar de seleccionarse a personal con competencias técnicas y experiencia en el área de la comunicación institucional. Esto provoca que las estrategias comunicativas carezcan de planificación, coherencia y objetivos claros, limitando su impacto en la comunidad.
A esta problemática se suma la falta de recursos financieros y tecnológicos. Los departamentos de comunicación de muchos ayuntamientos operan con presupuestos limitados y sin acceso a las herramientas modernas necesarias para llevar a cabo una gestión comunicativa efectiva.
La carencia de equipos audiovisuales, programas de edición y personal técnico especializado impide la difusión de información de calidad sobre las acciones municipales, y se desaprovechan las plataformas digitales, que hoy en día son esenciales para llegar a un mayor número de ciudadanos.
Otro aspecto crítico es la escasa autonomía de los directores de comunicación. En muchos ayuntamientos, el director de comunicación se ve subordinado a las decisiones políticas del alcalde o del equipo ejecutivo, sin posibilidad de desarrollar una línea de comunicación independiente y objetiva.
Este control excesivo genera una imagen parcializada de la gestión municipal, omitiendo información importante o exagerando logros, lo que a su vez provoca desconfianza entre los ciudadanos.
Además, existe una falta de entendimiento sobre la importancia estratégica de la comunicación en los gobiernos locales. En algunos ayuntamientos, el departamento de comunicación se percibe como un área secundaria, dedicada únicamente a relaciones públicas o protocolo, dejando de lado su función esencial de generar transparencia y fomentar la participación ciudadana.
Para enfrentar esta situación, es urgente que los ayuntamientos dominen la importancia de contar con directores de comunicación altamente capacitados, con conocimiento en gestión pública, relaciones con los medios y manejo de crisis. Asimismo, es fundamental que se les asignen los recursos adecuados para desarrollar campañas informativas eficaces, promover la rendición de cuentas y mantener una comunicación constante con la comunidad.
Fortalecer los departamentos de comunicación en los ayuntamientos dominicanos no solo mejorará la relación entre las autoridades locales y los ciudadanos, sino que contribuirá a una mayor transparencia y gobernanza. Si los directores de comunicación logran desempeñar su rol con independencia, profesionalismo y recursos adecuados, los municipios podrán enfrentar con mayor efectividad los desafíos locales, promoviendo una cultura de responsabilidad y participación ciudadana.
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